Autor: Dr. C. Yeran León Morejón / yeran.leon@upr.edu.cu
Tic, education and developing
Resumen: Este artículo analiza las potencialidades de las Tecnologías de la Información y la Comunicación a la luz de sus aportes a las Ciencias de la Educación. Se enfoca en las ventajas de la apropiación social de este recurso, así como los ejes que deben valorarse cuando se pretende un impacto en el desarrollo de un sujeto que aprende. Se expresan los núcleos conceptuales y se describen los mismos. Se persigue como objetivo reflexionar en torno a la utilización de las tecnologías informáticas en el proceso docente educativo de la escuela cubana contemporánea.
Abstract: This article examines the potentialities of information Technologies and the Communication in the light of its contributions to the educational Sciences. Its focus on the advantages of the social appropriation of this resource, as well as the axes that must be appraised when an impact in the development of a subject that you learn is attempted. The conceptual nuclei express themselves and they describe themselves the same. It is chased like objective to reflect about the utilization of the information-technology technologies in the school’s teaching educational process contemporary Cuban.
El desarrollo tecnológico ocurrido en el actual siglo XXI, propicia lo que algunos autores denominan como una nueva revolución social o «la sociedad de la información». Con ello, se desea hacer referencia a que la materia prima, denominada información, es el motor de esta sociedad, y en torno a ella, surgen profesiones y trabajos nuevos, o se readaptan las profesiones existentes.
La dimensión social de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) se vislumbra atendiendo a la fuerza e influencia que tiene en los diferentes ámbitos y a las nuevas estructuras sociales que están emergiendo, produciéndose una interacción constante y bidireccional entre la tecnología y la sociedad.
La influencia de la tecnología sobre la sociedad ha sido claramente explicitada por Area, (2002), en su ley sobre la relación entre tecnología y sociedad: «La tecnología no es buena ni mala, ni tampoco neutral, pero esta relación no debe entenderse como una relación fatalista y determinista, sino que a nuestro entender nos conduce a nuevas situaciones y planteamientos, que deben llevarnos a través de la investigación y el análisis de sus efectos, a tomar posiciones que marquen el camino y la dirección a seguir atendiendo a la sociedad que deseamos construir.
Los valores que dinamicen la sociedad serán los mismos que orienten el uso de las tecnologías, Sancho (2006) en el boletín económico «Técnica y Globalización», realiza una reflexión en profundidad sobre la globalización y la tecnología incidiendo en esta idea sobre la importancia de orientar su utilización para lograr una sociedad más humana, justa e igualitaria.
Cuestión esta que no queda ajena a la educación de las nuevas generaciones, siendo las Ciencias de la Educación una de las más influenciadas por las tecnologías en el presente siglo. De ahí que constituya objetivo de este artículo reflexionar en torno a la utilización de las tecnologías informáticas en el proceso docente educativo de la escuela cubana contemporánea.
Las TIC y el desarrollo de la educación
En líneas generales, podemos decir que las TIC giran en torno a tres ejes básicos: la informática, la microelectrónica y las telecomunicaciones; no sólo de forma aislada, sino de manera interactiva e interconectadas, lo que permite conseguir nuevas realidades comunicativas.
Existen múltiples instrumentos electrónicos que se encuadran dentro del concepto de TIC: la televisión, el teléfono, el video, el ordenador. Pero sin lugar a duda, los medios más representativos de la sociedad actual son los ordenadores que nos permiten utilizar diferentes aplicaciones informáticas (presentaciones, aplicaciones multimedia, programas ofimáticos) y más específicamente las redes de comunicación e Internet.
La sociedad de la información en la que estamos inmersos requiere nuevas demandas de los ciudadanos y nuevos retos a lograr a nivel educativo. Formar a ciudadanos críticos, autónomos y responsables, que tengan una visión clara sobre las transformaciones sociales que se van produciendo y puedan participar activamente en ellas, en un proceso de adaptación de la educación y la formación a los cambios continuos que se van produciendo a nivel social, cultural y profesional. (Belloch, 2012).
Las TIC se han integrado a la educación de forma paulatina. A las primeras reflexiones teóricas que los profesionales de la educación realizaban sobre la adecuación o no de estas tecnologías para el aprendizaje, se ha continuado con el análisis sobre el uso de estas y su vinculación a las teorías de aprendizaje, junto a propuestas metodológicas para su implementación.
Su impacto sobre la educación propicia uno de los mayores cambios en el ámbito social. A través de Internet, y de las informaciones y recursos que ofrece, en el aula se abre una nueva ventana que nos permite acceder a múltiples recursos, informaciones y comunicarnos con otros, lo que nos ofrece la posibilidad de acceder con facilidad a personalidades de opiniones diversas.
Por otro lado, las nuevas teorías de aprendizaje que centran su atención no tanto en el profesor y el proceso de enseñanza, sino en el estudiante y el proceso de aprendizaje, tienen un buen aliado en estos medios, si se utilizan atendiendo a los postulados del aprendizaje socio-constructivo y bajo los principios del aprendizaje significativo. (León, 2018).
El uso de las TIC en la educación depende de múltiples factores (infraestructuras, formación, actitudes, apoyo del equipo directivo, etc.), entre los cuales el más relevante es el interés y la formación por parte del profesorado, tanto a nivel instrumental como pedagógico. En el trabajo de los docentes al integrar los recursos tecnológicos se identifica un proceso de evolución que sigue cinco etapas.
Etapas de la integración de las TIC en la educación
- Acceso: aprende el uso básico de la tecnología.
- Adopción: utiliza la tecnología como apoyo a la forma tradicional de enseñar.
- Adaptación: integra la tecnología en prácticas tradicionales de clase, apoyando una mayor productividad de los estudiantes.
- Apropiación: actividades interdisciplinares, colaborativas, basadas en proyectos de aprendizaje. Utilizan la tecnología cuando es necesaria.
- Invención: Descubren nuevos usos para la tecnología o combinan varias tecnologías de forma creativa.
De igual modo, es importante estar alerta ante las posibles consecuencias negativas que el uso de las TIC pueda traer para el desarrollo y, frente a estas posibles amenazas y riesgos, diseñar estrategias que las disminuyan o minimicen.
Los avances tecnológicos abren posibilidades de innovación en el ámbito educativo, que llevan a repensar los procesos de enseñanza-aprendizaje y a llevar a cabo un proceso continuo de actualización profesional. Su uso inteligente, creativo y ético puede contribuir notablemente al desarrollo socialista, elevando los niveles de vida y la calidad de los servicios que se prestan al pueblo. La búsqueda de mecanismos y vías para la formación eficiente del aprendiz, necesidad que, sin duda alguna, está siendo cada vez más condicionada por las exigencias del mundo de hoy, implica dinámicas de cambios ante el desarrollo tecnológico y científico acelerado.
Referencias Bibliográficas
- Area, M. (2002). Sociedad de la Información, Tecnologías Digitales y Educación. Recuperado el 7 de abril del 2021 de: http://tecnologiaedu.us.es/bibliovir/pdf/tema1.pdf
- Belloch, C. (2012). Las Tecnologías de la Información y Comunicación en el aprendizaje. Departamento de Métodos de Investigación y Diagnóstico en Educación. Universidad de Valencia. Recuperado el 7 de abril del 2021 de http://www.uv.es/bellochc/pedagogia/EVA1.pdf
- León Morejón, Y. (2018). El aprendizaje humano (presentación digital). Universidad de Pinar del Río «Hermanos Saíz Montes de Oca». Recuperado el 7 de abril del 2021 de https://rc.upr.edu.cu/jspui/handle/DICT/2859
- Sancho, J. M. (2006). Tecnologías para transformar la educación. Madrid, España: Ed. Alkal.